domingo, 29 de junio de 2014

¡SILENCIO! ¡GENIOS TRABAJANDO! (CONSTRUCTORES Y CORREDORES)







    ¡Ah! ¡Qué distinta sería la vida si en lugar de competir, nos dedicáramos a construir juntos!!!

    ¿Un sueño imposible? De repente sí.  Pero no me negarán, estimados lectores, que las pequeñas y grandes empresas necesitan el concurso coordinado de quienes la conforman.  Desde el Gerente General hasta el Portero, todos tienen que caminar hacia un objetivo común. De otra manera, la Empresa fracasaría, se desmoronaría y pasaría como un soplo.  Dadas las circunstancias, mejor hacemos a un lado nuestra pecaminosa tendencia al Egoísmo, pues abrir de par en par las puertas hacia el Compartir es mucho más rentable. 

   A las pruebas me remito.  Pongamos de referencia al próspero Mercado Asegurador, tan ligado al Sistema Financiero que ambos incluso se encuentran regulados por la misma Ley 26702.  ¿Cómo funciona allá el sistema de corretaje?  Déjenme que les cuente, señores, ya que soy Corredora de Seguros desde el año 2005; y si bien hoy no ejerzo como tal, conozco perfectamente los usos y normas de este rubro.

   Un Corredor, Agente o Intermediario de Seguros (1)  debidamente registrado en la SBS,  tiene facultad de inscribirse en todas las Compañías de Seguros y cada una le asigna un código interno, sin  que esto  genere  ninguna  obligación  ni  dependencia laboral,  pues  por  Ley  – sea persona natural o jurídica- trabaja con las Aseguradoras, no para las Aseguradoras,  ya que su Cliente Específico es el Tomador del Seguro (2).  Sin embargo, entra y sale de las distintas sedes como Pedro en su casa.  Se le asigna un Ejecutivo Comercial para que le informe, lo mantenga al día sobre  todos  los  productos que estas ofrecen y  le entregue material gráfico o informático.  Y solo cuando coloca una póliza,  se le abona la comisión pactada. Y sanseacabó.  Esto no es obstáculo que las Aseguradoras tengan sus propio personal que atiende en  oficina y/ o en trabajo de campo.

Ahora bien, ¿cómo trasladar este sistema al rubro inmobiliario?

   Simple: La misma Ley 29080 y su Reglamento señalan el camino, ya que a nosotros los Agentes nos asigna como Cliente Específico al Intermediado que contrate nuestros servicios (3), es decir Propietarios, Compradores, Arrendatarios, etc.  Nos exige  firmar un documento de fecha cierta(4) con el Intermediado, en este caso el Constructor.  Entonces, señores Constructores, comencemos por lo primero: Elaborar un Formato Genérico de Autorización de Gestión de Venta Sin Exclusividad a manera de Convenio (5), que faculte al Agente Inmobiliario a intermediar en la venta de dichos inmuebles y de todos los que a futuro edifiquen la Constructora. Generar un código interno que identifique al Corredor no es nada del otro jueves y menos que sea el mismo Gerente Comercial el que se encargue de hacerle llegar la información vía mail.  Además, como no existiría una relación laboral, si no hay venta, no hay paga.  Al igual que en Seguros, no habría que hacer provisiones contables por concepto de planillas, Essalud, ONPE o AFP, CTS,  etc. 

    Me preguntarán algunos Constructores: “¿Y para qué necesitamos tanto jaleo, si con dos o tres empleados en caseta podemos tranquilamente vender?”  Cabe que les responda “qué tan tranquilamente están vendiendo ahora”, ya que la misma SBS ha tomado medidas precautorias para frenar el riesgo de Burbuja y los créditos hipotecarios no son tan fluidos como antes. Más claro:  Solos no pueden vender tranquilamente, señores.  Necesitan manos.

   Y no solo manos, sino también otras cabezas pensantes.

   Por tanto, este es el segundo de   LOS TRES INMENSOS BENEFICIOS de trabajar con nosotros:


CONTAR CON ASESORES QUE LOS MANTENGAN AL DÍA EN LAS NECESIDADES DEL MERCADO.


   Volvamos al ejemplo del rubro asegurador.  ¿Qué hacen las Compañías incluso antes de lanzar un nuevo producto? Convocan a “sus” Corredores inscritos para informarles del asunto y escuchar sugerencias. El café y los bocaditos están garantizados y a veces hasta el desayuno de trabajo. ¿Por qué y para qué tantas molestias? Porque el Corredor es quien está en contacto directo con el público. Y las Aseguradoras no tienen rubor en escuchar y aceptar los pedidos que hacemos quienes estamos en el campo.  Doy fe que los chequeos módicos y hasta gratuitos de los Seguros Oncológicos -producto en el que me especialicé– y otros beneficios fueron solicitados por nuestro intermedio.  Y  hasta  sugerimos  las clínicas y los médicos.  En  otros  ramos de Seguros, mis colegas hacen propuestas  que son muy bien aceptadas.  ¿Y cómo va el mercado asegurador? No he escuchado que alguna Compañía esté en peligro de quiebra. Claro que si quieren hacerse las graciosas, INDECOPI y/o la Defensoría del Asegurado siempre están disponibles.


   “¿Y para qué necesitamos los Constructores la opinión del Agente Inmobiliario, si nuestros Arquitectos tienen menciones honrosas y hasta han ganado concursos en el extranjero?”  No, señores.  No basta contar con las ideas y diseños exclusivos del Arquitecto fulano o zutano. Es necesario que Arquitectos e Ingenieros, por mucho que se hayan especializado en Europa,  tengan en perspectiva lo que realmente necesita y reclama el mercado puntual.  El diseño de vanguardia puede ser fabuloso desde el punto de vista estético, pero a veces no le sirve a la Madre de Familia, antes bien le complica la vida porque las Áreas Comunes pueden acicatear el relajo y hasta el vicio de hijos y esposos (piénsese si no, en las salas de billar), o bien elevan el costo del mantenimiento a niveles realmente exorbitantes, que ni un sueldo mínimo triplicado podría cubrir.  Y hasta pueden poner en peligro la seguridad y la vida de los niños.

   Se dirá que en esto último exagero. Pero jamás olvidaré que enseñando el departamento de un edificio ubicado en San Isidro, nos asomamos a la ventana para que mi cliente apreciara la piscina. ¡Y nos dimos con la espantosa escena de dos criaturas de menos de cinco años que, con una red de limpieza, intentaban sacar la pelota que se había caído al agua!!! ¡Ningún adulto estaba presente!!!!  Se me erizaron los cabellos:

   -¡Disculpe, señora! ¡Pero tengo que bajar!

  Y fue esta misma dama quien amablemente me instó a que me apresurara.  Volé al ascensor, ya que estábamos en el octavo piso, llegué hasta las niñas e impedí que siguieran intentando sacar la pelota. A los dos minutos se presentó la nana, diciendo muy oronda:

  -¡No se preocupe! ¡Las niñas saben nadar!

  ¿Cómo fue que me contuve para no gritar ni hacerle un escándalo? Lo ignoro. Pero para mis adentros me repetía cientos de veces:

  -¡YO LA MATOOO!!!!!!  ¡LA MATOOO!!!!!!

   Piscina en un edificio multifamiliar tiene sus bemoles.  Mas nuestra experiencia como Corredores Inmobiliarios va más allá de las simples advertencias para las Áreas Comunes.  Y traigo a colación el caso de una Constructora – cuyo nombre obviamente me reservo – que está edificando un proyecto en un área populosa,  saturada de transporte público una hora sí y la otra también.  El diseño del edificio es hermoso. Los acabados, de primera.  Los ambientes, amplios y muy iluminados. Con ventanas antirruido de tecnología de punta. El metraje mínimo pasa los 120 m2, por tanto los precios exceden los $ 200,000.   Todo está muy lindo,  pero  tienen  un pequeño  gran problema: ¡NO VENDEN!   Ya  no saben  qué  hacer y… nosotros  tampoco, porque  no  nos  llaman por ese  Proyecto.   Nos  contó  su  gerente  que  nunca  trabajaron  con  Agentes…  No  hubo  quien  les  advirtiera  que - salvo rara excepción - nadie iba a  invertir más de $ 200,000 para disfrutar a diario una carrera de micros  y escuchar el concierto de bocinas y cobradores en hora punta: 

   -¡¡¡Ta, ta, taaaaaaaaaaaa!!!

   -¡Sube, sube, subeeee!!!! ¡Ya llevaaaaaaa!!!!!

    Por desgracia para esta Constructora no hay vuelta atrás, pues la edificación ya llegó al nivel cero (6).  ¡Y si les contara un pequeño gran defecto que tiene otro edificio superexclusivo!  Estudiando los planos y rompiéndome la cabeza para amalgamar un argumento de ventas, llegué a la conclusión de que, en conciencia, no lo debía captar.  Pues los Corredores de Seguros estudiamos Inspección de Riesgos.  Y somos capaces de ver el peligro de tal o cual diseño que no ofrezca vías de escape inmediatas para casos de sismo y/o incendio, así los planos estén aprobados por la Municipalidad y sean el último grito de la moda arquitectónica europea y estadounidense.  ¡Ojalá la materia en cuestión se implementara en el Curso de Especialización del Agente Inmobiliario!  ¡Pero de nada servirá, si un buen porcentaje de Constructores siguen empeñados en mirarnos como rivales y no como aliados!

    Sería estupendo que antes de lanzar un Proyecto al mercado - sea familiar, comercial, industrial o de otra índole-, se contara con el concurso de los Agentes especialistas en cada ramo:


¡SILENCIO! ¡GENIOS TRABAJANDO!

   En el rubro asegurador es una escena muy común. ¡Y muy enriquecedora!  ¿Por qué no puede ser igual en el rubro inmobiliario?

   Señores constructores, en este caso son ustedes los que tienen la última palabra.


Notas Aclaratorias:
(1) Corredor, Agente o Intermediario de Seguros: Se nos conoce indistintamente por cualquiera de estas denominaciones, pero La Ley 26702 nos agrupa dentro del grupo de los Intermediarios. Y de manera específica nos asigna el nombre de “Corredores de Seguros”.
(3) Art. 11 del Reglamento de la Ley 29080:  D. S. 004-2008-VIVIENDA .
(4) Documento de Fecha Cierta en Intermediación Inmobiliaria: Art. 1 del Decreto Supremo No. 008-2011-VIVIENDA (NormasLegales-Pág 447035).
(5) Convenio:  Modelo sugerido.
(6) Nivel cero: El mismo nivel de la altura de la vereda. Sirve de referencia para toda la obra.



2 comentarios:

  1. Hola René me parecen muy buenos tus artículos, tengo una consulta: en tu basta experiencia qué podrías sugerir a los bancos que financian estos proyectos?

    ResponderBorrar
  2. Disculpa tanta demora en responderte. Por defecto del sistema recién veo tu comentario.

    En líneas generales la banca aquí está bien organizada en lo que a financiamiento se refiere. Pero sí sugeriría que el comité técnico fuera más estricto al evaluar los diseños. Algunos de estos no se ajustan a lo normado en el Reglamento Nacional de Edificaciones. La Seguridad no va reñida con la Estética, pero cuando están encontradas, es indispensable elegir la primera.

    Gracias por tu participación.

    ResponderBorrar