¡Ah! ¡Qué
distinta sería la vida si en lugar de competir, nos dedicáramos a construir
juntos!!!
¿Un sueño imposible? De repente sí. Pero no me negarán, estimados lectores, que las
pequeñas y grandes empresas necesitan el concurso coordinado de quienes la
conforman. Desde el Gerente General
hasta el Portero, todos tienen que caminar hacia un objetivo común. De otra
manera, la Empresa fracasaría, se desmoronaría y pasaría como un soplo. Dadas las circunstancias, mejor hacemos a un
lado nuestra pecaminosa tendencia al Egoísmo, pues abrir de par en par las
puertas hacia el Compartir es mucho más rentable.
A las pruebas me remito. Pongamos de referencia al próspero Mercado Asegurador,
tan ligado al Sistema Financiero que ambos incluso se encuentran regulados por
la misma Ley 26702. ¿Cómo funciona allá
el sistema de corretaje? Déjenme que les
cuente, señores, ya que soy Corredora de Seguros desde el año 2005; y si bien
hoy no ejerzo como tal, conozco perfectamente los usos y normas de este rubro.
Un Corredor, Agente o Intermediario de
Seguros (1) debidamente registrado en la SBS, tiene facultad de inscribirse en todas las Compañías de Seguros y
cada una le asigna un código interno, sin
que esto genere ninguna
obligación ni dependencia laboral, pues por Ley – sea
persona natural o jurídica- trabaja con las Aseguradoras, no
para las Aseguradoras, ya que su Cliente Específico es el Tomador
del Seguro (2). Sin embargo, entra y
sale de las distintas sedes como Pedro en su casa. Se le asigna un Ejecutivo Comercial para que le informe, lo
mantenga al día sobre todos los productos
que estas ofrecen y le entregue material
gráfico o informático. Y solo cuando coloca una póliza, se le abona la comisión pactada. Y sanseacabó. Esto no es obstáculo que las Aseguradoras
tengan sus propio personal que atiende en oficina y/ o en trabajo de campo.
Ahora
bien, ¿cómo trasladar este sistema al rubro inmobiliario?
Simple: La misma Ley 29080 y su Reglamento
señalan el camino, ya que a nosotros los Agentes nos asigna como Cliente
Específico al Intermediado que contrate nuestros servicios (3), es decir Propietarios, Compradores,
Arrendatarios, etc. Nos exige firmar un documento de fecha cierta(4) con el Intermediado, en este caso
el Constructor. Entonces, señores
Constructores, comencemos por lo primero: Elaborar un Formato Genérico de Autorización de Gestión de Venta Sin
Exclusividad a manera de Convenio (5), que faculte al Agente
Inmobiliario a intermediar en la venta de dichos inmuebles y de todos los que a
futuro edifiquen la Constructora. Generar un código interno que identifique
al Corredor no es nada del otro jueves y menos que sea el mismo Gerente
Comercial el que se encargue de hacerle llegar la información vía mail. Además, como no existiría una relación
laboral, si no hay venta, no hay paga.
Al igual que en Seguros, no habría que hacer provisiones contables por
concepto de planillas, Essalud, ONPE o AFP, CTS, etc.
Me
preguntarán algunos Constructores: “¿Y
para qué necesitamos tanto jaleo, si con dos o tres empleados en caseta podemos
tranquilamente vender?” Cabe que les
responda “qué tan tranquilamente están vendiendo ahora”, ya que la
misma SBS ha tomado medidas precautorias para frenar el riesgo de Burbuja y los
créditos hipotecarios no son tan fluidos como antes. Más claro: Solos no pueden vender
tranquilamente, señores. Necesitan
manos.
Y no solo manos, sino también otras cabezas
pensantes.
Por
tanto, este es el segundo de LOS TRES INMENSOS BENEFICIOS de
trabajar con nosotros:
CONTAR CON ASESORES QUE LOS MANTENGAN AL DÍA EN LAS NECESIDADES DEL MERCADO.
Volvamos al ejemplo del rubro
asegurador. ¿Qué hacen las Compañías incluso
antes de lanzar un nuevo producto? Convocan
a “sus” Corredores inscritos para informarles del asunto y escuchar
sugerencias. El café y los bocaditos están garantizados y a veces hasta el
desayuno de trabajo. ¿Por qué y para qué tantas molestias? Porque el Corredor es quien está en contacto
directo con el público. Y las Aseguradoras no tienen rubor en escuchar y aceptar los pedidos que
hacemos quienes estamos en el campo. Doy
fe que los chequeos módicos y hasta gratuitos de los Seguros Oncológicos -producto en
el que me especialicé– y otros beneficios fueron solicitados por nuestro
intermedio. Y hasta sugerimos
las clínicas y los médicos. En otros ramos
de Seguros, mis colegas hacen propuestas
que son muy bien aceptadas. ¿Y cómo va el mercado asegurador? No he
escuchado que alguna Compañía esté en peligro de quiebra. Claro que si
quieren hacerse las graciosas, INDECOPI y/o la Defensoría del Asegurado siempre
están disponibles.
“¿Y para qué necesitamos los Constructores la
opinión del Agente Inmobiliario, si nuestros Arquitectos tienen menciones
honrosas y hasta han ganado concursos en el extranjero?” No, señores. No basta contar con las ideas y diseños
exclusivos del Arquitecto fulano o zutano. Es necesario que Arquitectos e Ingenieros,
por mucho que se hayan especializado en Europa, tengan en perspectiva lo que realmente necesita
y reclama el mercado puntual. El diseño
de vanguardia puede ser fabuloso desde el punto de vista estético, pero a veces no le sirve a la Madre de Familia,
antes bien le complica la vida porque las Áreas Comunes pueden acicatear el
relajo y hasta el vicio de hijos y esposos (piénsese si no, en las salas de
billar), o bien elevan el costo del
mantenimiento a niveles realmente exorbitantes, que ni un sueldo mínimo
triplicado podría cubrir. Y hasta pueden
poner en peligro la seguridad y la vida de los niños.
Se dirá que en esto último exagero. Pero
jamás olvidaré que enseñando el departamento de un edificio ubicado en San
Isidro, nos asomamos a la ventana para que mi cliente apreciara la piscina. ¡Y
nos dimos con la espantosa escena de dos criaturas de menos de cinco años que,
con una red de limpieza, intentaban sacar la pelota que se había caído al agua!!!
¡Ningún adulto estaba presente!!!! Se me
erizaron los cabellos:
-¡Disculpe,
señora! ¡Pero tengo que bajar!
Y fue esta misma dama quien amablemente me
instó a que me apresurara. Volé al
ascensor, ya que estábamos en el octavo piso, llegué hasta las niñas e impedí
que siguieran intentando sacar la pelota. A los dos minutos se presentó la
nana, diciendo muy oronda:
-¡No se
preocupe! ¡Las niñas saben nadar!
¿Cómo fue que me contuve para no gritar ni hacerle
un escándalo? Lo ignoro. Pero para mis adentros me repetía cientos de veces:
-¡YO LA MATOOO!!!!!! ¡LA MATOOO!!!!!!
Piscina en un edificio multifamiliar tiene
sus bemoles. Mas nuestra experiencia
como Corredores Inmobiliarios va más allá de las simples advertencias para las
Áreas Comunes. Y traigo a colación el
caso de una Constructora – cuyo nombre obviamente me reservo – que está
edificando un proyecto en un área populosa, saturada de transporte público una hora sí y
la otra también. El diseño del edificio
es hermoso. Los acabados, de primera.
Los ambientes, amplios y muy iluminados. Con ventanas antirruido de
tecnología de punta. El metraje mínimo pasa los 120 m2, por tanto los precios
exceden los $ 200,000. Todo está muy
lindo, pero tienen un
pequeño gran problema:
¡NO VENDEN! Ya no saben qué hacer
y… nosotros tampoco, porque no nos llaman por ese Proyecto. Nos contó su gerente
que nunca trabajaron
con Agentes… No hubo
quien les
advirtiera que - salvo rara excepción - nadie iba a invertir más de $ 200,000 para disfrutar a diario una carrera de micros y escuchar el concierto de bocinas y
cobradores en hora punta:
-¡¡¡Ta,
ta, taaaaaaaaaaaa!!!
-¡Sube,
sube, subeeee!!!! ¡Ya llevaaaaaaa!!!!!
Por desgracia para esta Constructora no hay
vuelta atrás, pues la edificación ya llegó al nivel cero (6). ¡Y si les contara un pequeño
gran defecto que tiene otro edificio superexclusivo! Estudiando los planos y rompiéndome la cabeza
para amalgamar un argumento de ventas, llegué a la conclusión de que, en
conciencia, no lo debía captar. Pues los
Corredores de Seguros estudiamos Inspección
de Riesgos. Y somos capaces de ver
el peligro de tal o cual diseño que no ofrezca vías de escape inmediatas para
casos de sismo y/o incendio, así los planos estén aprobados por la
Municipalidad y sean el último grito de la moda arquitectónica europea y
estadounidense. ¡Ojalá la materia en
cuestión se implementara en el Curso de Especialización del Agente
Inmobiliario! ¡Pero de nada servirá, si un
buen porcentaje de Constructores siguen empeñados en mirarnos como rivales y no
como aliados!
Sería estupendo que antes de lanzar un
Proyecto al mercado - sea familiar, comercial, industrial o de otra índole-, se
contara con el concurso de los Agentes especialistas en cada ramo:
¡SILENCIO!
¡GENIOS TRABAJANDO!
En el rubro asegurador es una escena muy
común. ¡Y muy enriquecedora! ¿Por qué no
puede ser igual en el rubro inmobiliario?
Señores constructores, en este caso son
ustedes los que tienen la última palabra.
Notas
Aclaratorias:
(1)
Corredor, Agente o Intermediario de Seguros: Se nos conoce indistintamente por
cualquiera de estas denominaciones, pero La Ley 26702 nos agrupa dentro del
grupo de los Intermediarios. Y de manera específica nos asigna el nombre de “Corredores de Seguros”.
(2)
Ver Art. 340 de la Ley 26702
(3)
Art. 11 del Reglamento de la Ley 29080: D. S. 004-2008-VIVIENDA .
(4) Documento
de Fecha Cierta en Intermediación Inmobiliaria: Art. 1 del Decreto Supremo No. 008-2011-VIVIENDA (NormasLegales-Pág 447035).
(5) Convenio: Modelo sugerido.
(6) Nivel
cero: El
mismo nivel de la altura de la vereda. Sirve de referencia para toda la obra.
Hola René me parecen muy buenos tus artículos, tengo una consulta: en tu basta experiencia qué podrías sugerir a los bancos que financian estos proyectos?
ResponderBorrarDisculpa tanta demora en responderte. Por defecto del sistema recién veo tu comentario.
ResponderBorrarEn líneas generales la banca aquí está bien organizada en lo que a financiamiento se refiere. Pero sí sugeriría que el comité técnico fuera más estricto al evaluar los diseños. Algunos de estos no se ajustan a lo normado en el Reglamento Nacional de Edificaciones. La Seguridad no va reñida con la Estética, pero cuando están encontradas, es indispensable elegir la primera.
Gracias por tu participación.